Jorge Herrera es un joven emprendedor que desde hace un tiempo visita las cercanías del Parque Infantil, en el centro de San Salvador, con su emprendimiento Don Sándwich. Herrera de 23 años comenzó con el negocio de manera informal desde hace dos meses luego de ser despedido de su trabajo en un call center.
Desde sus redes sociales promueve su venta y todos los días está informando a sus clientes los puntos que visitará durante la jornada, en las mismas se puede ver la respuesta de los usuarios quienes hacen sus pedidos e incluso le sugieren que visite la zona de las empresas donde laboran. Jorge también recibe pedidos para eventos como fiestas de cumpleaños y cualquier tipo de reuniones sociales y familiares.
“Todos los días llego a las 6:30 de la mañana al Parque Infantil, ahí me quedo hasta las 8y luego recorro algunas calle aledañas donde hay clientes que me esperan para desayunar con un sándwich”, comenta mientras habla sobre otros sitios a los que ha empezado a llevar este platillo a pedido de los personas que ya conocen su producto.
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Esta semana por ejemplo, ha empezado a llegar con su caja térmica a Metro Galería y espera con el tiempo poder seguir expandiendo el negocio.
“Siempre pensé que no quería ser un empleado toda mi vida”, reitera. Relata que cuando estaba en el call center ganaba de la venta entre $50 y $60 en un solo día. “Soy comerciante informal, toda mi vida he vendido y es lo que me gusta hacer, siempre me ha gustado y sé que es donde puedo ganar más dinero, siempre que mantenga orden y una buena organización financiera, que también es lo que ayuda”, añade.
Llevar su negocio a las redes sociales también la ha permitido darse a conocer y que más clientes conozcan su marca.
“Mi mamá siempre me decía cuando llegaba de estudiar todos los días: “vende y vas a comer” y esa fue la lección más grande de vida, perder el miedo para lograr mis sueños”, escribió en Facebook en abril pasado junto a una fotografía en la zona del Parque Infantil. Rápidamente la foto se hizo viral y fue compartida más de 2 mil veces.
“Eso me motivó aún más… y me dio la idea de abrir una página de mi negocio”, “Amo vender, y hasta ahora no me veo como empleado nuevamente, por el contrario mi meta es que un día las personas puedan buscar mis sándwiches en un establecimiento donde pueda atenderles como se merecen”, añade.
Jorge Herrera también tiene formación como entrenador físico, por varios años se desempeñó en un gimnasio de San Salvador. Relata que quiso entrenar en físico culturismo, pero no tenía dinero para comprar suplementos y llevar la dieta requerida por lo que decidió dejar a un lado esa idea. Es bachiller contador, y domina perfectamente el idioma inglés, posee además una certificación en soporte técnico. Actualmente reside en Cuscatancingo.
“A veces la gente me critica porque trato de andar presentable siempre, pero cuando yo era pequeño solo tenía dos pantalones y esos eran los que iba lavando para volver a usarlos, tuve varias limitaciones y sé que vendiendo es como voy a salir adelante; toda la gente lo hace, todos venden alguna cosa en su vida y a mi me gusta hacer esto”, concluye.
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