Una de las tendencias más populares del street style estas últimas temporadas son los monos utility o de trabajo. Dior y Stella McCartney fueron los primeros en subirlos a sus pasarelas y celebridades como las hermanas Hadid fueron las encargadas de propagarlos por el mundo.

Este tipo de mono se ha convertido en la prenda preferida por las insiders para el día a día, y actualmente podemos encontrarlo casi en cualquier tienda que siga las últimas tendencias.

Ralph Lauren siempre ha sido una marca que ha querido reflejar la sociedad americana desde el lujo y se ha convertido en tendencia mundial en Twitter por una de sus prendas: un mono de trabajo valorado en 690,00 €.

Recientemente la prenda ha sido rebajada en España y la indignación por el mono ha desatado todo tipo de críticas en Twitter. La tónica general de los tuits vertidos sobre el tema era sobre cómo una firma de lujo utiliza un diseño del mundo obrero, de personas que jamás podrán permitirse nada de esa marca por los precios, para romantizar su precariedad.

Sin embargo, entre la indignación el debate está servido por aquellos que apoyan que no es algo de clase, sino una referencia cultural hacia los artistas plásticos que trabajaban con este tipo de indumentaria para no mancharse su ropa o todo el proceso creativo que tiene que llevar detrás.

No es la primera vez que una prenda de una firma de lujo crea polémica por casos como este. Gucci también se ha visto salpicado por este tipo de escándalos, primero por vender unos pantalones con manchas falsas de hierba en las rodillas por un precio de casi 700 euros o unas medias rotas por 140 €.