La pelea familiar entre Kiko Rivera e Isabel Pantoja, a raíz de la herencia de Paquirri, cada día añade un nuevo capítulo. Esta vez ha sido el DJ el que ha querido hacer llegar sus intenciones a la cantante y, siempre teniendo presente el escenario principal; Cantora.

Esta semana se especuló una posible colaboración musical de Isabel junto a Omar Montes en la finca de Cantora, algo que perjudicaría a Kiko Rivera dentro de la disputa familiar que mantienen.

El DJno ha hecho esperar mucho tiempo su respuesta, esta ha sido clara. Nada más salir del hospital, el empresario ha publicado en su perfil de Instagram el lanzamiento de su nueva línea de ropa con la que busca atacar directamente a su madre.

Kantora is mine, la línea de ropa de Kiko Rivera

“Ya llegó el día del estreno de mi nueva marca… Espero que os guste y tenga una bonita aceptación para ir mejorándola y haciendo más cositas…Espero la disfrutéis tanto como yo creándola. Os quiero” ha compartido como pie de foto de la publicación, en la que se puede ver el logo de la marca.

El diseño se encuentra formado por una corona y un toro con halas, acompañado de las palabras “Kantora is mine” (Cantora es mía). Una vez más Kiko reclama lo que es suyo, es decir, su derecho de propiedad sobre la finca dónde actualmente reside su madre.

Entre los distintos artículos se pueden observar riñoneras, camisetas, gorras y también fundas de móvil, todos ellos se pueden adquirir mediante su página web. Los precios rondan entre los 15 y 25 euros y las prendas se encuentran disponibles para ambos sexos.

Cantora: la herencia envenenada

Uno de los problemas que enfrenta a madre e hijo es la posesión de la popular finca de Cantora. Cuando Paquirri murió dejo en herencia la mitad de la casa a Kiko y la otra mitad a Isabel Pantoja.

El problema apareció cuando, Kiko Rivera confesaba en el especial de Telecinco, Cantora: la herencia envenenada,que su madre había puesto en venta la mitad que le corresponde a él. Kiko pasó a declarar que a su madre le importa más el dinero que su propia familia.

También ha confesado que su madre había hipotecado la finca en más de una ocasión metiéndole a él en una hipoteca del que no era consciente desde hace 18 años. “Yo no cedí Cantora a sabiendas. Yo firmé lo que ella me pidió” declara Kiko.

Pero, Kiko Rivera no va a dejar todo ahí. El DJ está dispuesto a llegar hasta el final y no va a dejar que su madre se salga una vez más con la suya.