Antes de trabajar en el corto de animación BU, Allpa Studio había realizado los efectos visuales de varios videos musicales, largometrajes y anuncios publicitarios. Este colectivo, nacido oficialmente en 2020, se ha dedicado, sobre todo, a la corrección de color, los efectos visuales y motion graphics, y está integrado por Amed A. Bueno, Daniel Reyes y Daniel Alemán.

El encargo de los efectos para el video “Let me be your lover”, de los cantantes Enrique Iglesias y Pitbull y dirigido por Alejandro Pérez, “fue un gran desafío, pues debutamos con una gran producción y una enorme responsabilidad”. Según Daniel Alemán Montero, “el equipo ha tenido que crecerse a través de los años, empujando cada vez más los límites de lo que es posible hacer”.

Ahora se han dedicado a la realización de BU, donde ese ilustrador, diseñador gráfico y de efectos visuales debuta en la dirección. Además de este corto, que muchos aseguran cambiará la historia de la animación en Cuba, Allpa Studio continúa trabajando en audiovisuales, como los video clips “Voy” de Eme Alfonso y “Cuenta pendiente” de Paty Cantu y Alejandro Sanz, y el spot de la XIII Bienal de La Habana.

En BU trabajan también la productora Yamila Marrero, Sheyla Pool en el diseño de sonido, Eddy Cardoza en la composición musical, y Eduardo Eimil en la dirección de actores. Una vez estrenado, demostraría las posibilidades de la animación de alta factura en Cuba.

“BU parte de un propósito personal para realizar un cortometraje de animación al que le dediqué algunas semanas en 2019 —explica Alemán—, pero solo llegó a tener un primer borrador de guion y el diseño de personajes y escenarios.

“A mediados de 2020, con algo más de experiencia y mejores condiciones, retomo la idea de crear un corto de animación y dimos los primeros pasos de lo que sería BU. Se encuentra ahora en etapa de animación, render y composición. Luego de grabar las voces, con el talento de Deysi Forcade y Grisell Monzón, y editar el sonido, el corto comienza a entregar planos finalizados y avanza constantemente añadiendo unos cuantos segundos cada semana.

Una historia original

EPP: Dos hermanos: Kevin y Ana, una casa del árbol y una tormenta. Tres minutos de duración… Esto es lo que sabemos de BU. ¿Podrías darnos otros avances?

DAM: Se desarrolla en el presente, en un lugar sin determinar. Todo comienza cuando Kevin le cuenta a Ana una historia de miedo que será el eje alrededor del cual se desarrolla el corto.

No puedo ofrecer más detalles, ya que al durar tan poco cualquier cosa que revele de la trama comprometería la historia.

EPP: ¿Es un argumento original o una adaptación? ¿Cómo fue el trabajo con el guion?

DAM: Es una historia original, y la premisa principal ya la tenía clara cuando nos lo planteamos. También los personajes estaban definidos, pues venían heredados de un proyecto previo.

EPP: ¿Cómo concibieron o diseñaron los personajes?

DAM: El diseño actual de los personajes se lo debemos a Daniel Reyes, al frente del trabajo de arte durante los primeros meses del proyecto. Tomó la base de un diseño anterior y les hizo una puesta al día que significó un cambio radical en el acabado de estos.

Ya en la etapa del 3D nos repartimos tareas: Daniel se encargó del texturizado, Ame A. Bueno del rigging (el esqueleto que permite animar al personaje) y yo del modelado y el pelo. Nos fijamos mucho en los personajes creados por Disney en los últimos años y el tratamiento de texturas y luces de Illumination, principalmente.

Un software que abre muchas posibilidades

Acerca del software libre que utilizaron, asegura Alemán que “Blender abre muchas posibilidades para los jóvenes artistas, y en especial a los de Cuba. Pone al alcance de todos de manera gratuita una herramienta muy potente que compite con los estándares de la industria”.

“Tiene la ventaja de hacer un poco de todo, no solo modelar y animar en 3D, sino que se usa para la animación 2D, simulaciones, esculpido digital, composición y edición de video. Si le sumas que es un programa relativamente ligero de ejecutar, lo hace ideal para cualquiera que se inicie en el 3D y la animación y posea un ordenador de pocas prestaciones.

“Además, cuenta con un fenómeno que no he visto alrededor de otros softwares, pues quizás por el hecho de ser libre, tiene una comunidad muy fuerte y abierta a compartir conocimiento, donde los artistas 3D brindan tutoriales y consejos a los que adentran en este mundo.”

EPP: ¿Crees que el corto permitirá llamar la atención sobre las posibilidades reales de trabajar la animación de primer nivel en Cuba?

DAM: Creo que BU sí será, al menos, capaz de mostrar que es posible realizar un producto de animación de alta factura desde Cuba. Los fragmentos terminados son muy alentadores y han superado nuestras expectativas.

Por otra parte, no hay que perder de vista que es un corto de pocos minutos, en el que, además, debuto como director. El proyecto ha despertado cierto interés desde el comienzo y tratamos de obtener lo mejor que seamos capaces de lograr, pero siendo una primera obra estoy seguro que habrá elementos que mejorar y errores de los que aprender.

La animación, al igual que el cine, es una industria compleja y costosa, y extrapolar las experiencias recogidas en BU o aventuras similares a una escala nacional, requiere de la participación de muchos factores. En un momento como el actual es difícil pronosticar el futuro a largo plazo en un escenario donde las prioridades cambian continuamente.

EPP: ¿Hay intenciones de que BU sea el preámbulo de un largometraje?

DAM: Está planteado de manera que las tareas y el sistema de producción sean escalables a un largo, ya que ha seguido los mismos pasos de desarrollo que se llevarían a cabo en una gran producción. El corto en sí pudiera ser visto como la mini historia que da inicio a algunos largos, aunque cuenta con su propio inicio, desarrollo y cierre; pero actualmente no hay planes de convertirlo en un largometraje.

EPP: La posproducción de sonido ha sido financiada en parte por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (Icaic). ¿Han recibido algún otro financiamiento?

DAM: El proyecto recibió el apoyo del Icaic pero, aparte de eso, BU es totalmente autofinanciado. Realmente, la pasión de los miembros del equipo es lo que ha podido sacarlo adelante.

Una pequeña ventana abierta al futuro

EPP: Comparten el work in progress del corto en su perfil de Instagram y en otras redes sociales… ¿Se han planteado esto como una especie de estrategia de visibilidad?

DAM: Como estudio independiente, las redes sociales son la herramienta más accesible para ganar visibilidad. Fue concebido así desde un inicio, pues parte del objetivo era mostrar y recoger el proceso de trabajo, las experiencias y compartir cómo es la labor de realizar un animado.

El trabajo en redes ha logrado dirigir la atención hacia un producto de animación hecho en Cuba. Nos permite tener una retroalimentación en tiempo real con los usuarios y es una fuente de motivación y responsabilidad mientras las expectativas crecen.

EPP: ¿Cómo valoras el estado actual de la animación en Cuba?

DAM: Actualmente es escasa y sostenida por unos pocos amantes de este arte que tratan de desarrollarla pese a todas las dificultades. No creo justo compararla con otros países, pues se desarrollan en condiciones muy diferentes. Además de ejemplos aislados, la producción de animados a escala global se concentra en un puñado de países, existiendo un espacio abismal entre estos y el resto.

Sin embargo, creo que sí hay una pequeña ventana a futuro. La democratización de la tecnología junto con un cierto grado de acceso a Internet, ha permitido el surgimiento de una nueva generación de artistas y la formación de fórums y chats donde los creadores 3D de Cuba comparten sus trabajos y conocimientos.

Puedes ver en estos sitios un crecimiento constante de la calidad y cantidad de los trabajos compartidos, que dan evidencia de que sí existe un gran talento para la animación y el arte 3D en Cuba (2021).