Empecemos por el entorno en el que se ha celebrado el enlace: la espectacular finca de North Salem. Situada en el estado de Nueva York, se trata de un regalo que Bill y Melinda Gates le hicieron a su hija Jennifer cuando se graduó en 2018 en Biología por la Universidad de Stanford. Valorada en 14 millones de euros, es una finca de caballos con numerosos establos y pistas de entrenamiento, una de las pasiones que Jennifer comparte con su marido Nayel. Además, hace años sus padres también desembolsaron 10 millones de euros en unas propiedades para caballos en Wellington, Florida.

Jennifer vistió para su boda civil (no han trascendido imágenes de su enlace musulmán) un diseño creado en exclusiva por Vera Wang.El vestido era de encaje y manga larga, y la novia optó por llevar un pequeño recogido que dejaba todo el protagonismo a su característica melena pelirroja. Sus numerosas damas de honor iban vestidas de verde oscuro. Su madre Melinda llevó un vestido en color burdeos.

Los novios recibieron a sus invitados en unos pabellones acristalados que se han construido especialmente para la ocasión. Se sabe que durante el cóctel contaron con la música en directo de Coldplay, que el catering lo sirvió Gallucci's del chef Johnny Fleischman, que la tarta nupcial de ocho pisos fue encargada a Ladurée, y que toda la puesta en escena fue obra de la wedding planner Marcy Blum. Se estima que la boda ha costado dos millones de dólares.

Jennifer y Nayel se conocieron en Stanford, donde el estudiaba Economía y ella Biología. Por cierto, que no contenta con su primera carrera, Jennifer está cursando Medicina en la Escuela de Medicina Icahn de Mount Sinai en Nueva York. Nayel, que se crió en Kuwait, es jinete profesional y participó en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio. Además. tiene un negocio de entrenamiento y venta de caballos en San Diego.

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