Jorge (nombre ficticio) cometió «varios errores de bulto» en su última entrevista de trabajo para un puesto en el departamento de compras de una gran cadena de supermercados. «El primero y fundamental es que al ser por videollamada me relajé más de la cuenta y no la preparé como debía», explica este joven de 29 años, licenciado en Administración y Dirección de Empresas. «Me pasó de todo. Se me interrumpía la conexión, no oía bien a mi entrevistador, entró mi pareja en la habitación, me hicieron preguntas que me pillaron totalmente en fuera de juego... Solo faltó que me pidiesen que me levantara y me viesen en pantalón corto», recuerda con cierto bochorno.

El caso de Jorge es más habitual de lo que pensamos, sobre todo cuando los procesos de selección de personal se hacen por videollamada. «No podemos olvidar que se trata de una entrevista de trabajo. El que se haga a través de otro formato no la hace ni menos importante ni más informal», advierte Gina Aran, directora ejecutiva de la consultoría de Recursos Humanos Inginium y profesora de Habilidades Directivas en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). Para la experta, la clave de cualquier entrevista de trabajo es «la preparación previa». «Antes de iniciar cualquier proceso de selección, los aspirantes tienen que tener muy presente 'la triple A'. Se trata de demostrar nuestra aptitud, actitud y crear afinidad comunicativa con la persona que nos entrevista», precisa la también profesora asociada en la ESADE Business School.

En este sentido, Gina Aran recomienda «antes de nada» hacer una revisión de la trayectoria profesional (logros y fortalezas), informarse a fondo sobre la empresa (trayectoria, historia reciente, valores) y practicar, practicar y practicar. «Todos podemos intuir qué clase de preguntas nos van a hacer, así que lo mejor en ensayar lo que vamos a decir. Hablar en voz alta, grabarse... Practicar nos hará ganar confianza y cuando llegue el momento vamos a estar mucho más ágiles en las respuestas». Para evitar una situación como la vivida por Jorge hace unas semanas, es importante seguir las recomendaciones de los expertos en selección de personal sobre cómo se debe hacer una entrevista de trabajo por videollamada.

LAS CLAVES

Hay que asegurarse de que ese día y a esa hora vamos tener una buena conexión a internet. «Si tenemos alguna duda, lo mejor es buscar otro lugar para conectarnos con todas las garantías», señala la autora del libro 'Comunicación persuasiva para la entrevista de trabajo'. También es importante verificar que conocemos el programa que se va a usar. «Puede ser Zoom, Meet, Teams... Sea cual sea la plataforma a través de la que nos convoquen, debemos comprobar previamente que la sabemos utilizar. Y eso incluye saber compartir pantalla, escribir en el chat y enviar documentos». Los expertos recomiendan colocar la cámara del dispositivo que se use para la entrevista –ya sea ordenador (el más recomendable), tablet o móvil– a la altura de los ojos y con una separación aproximada de la cara de unos 80 centímetros. «Un truco para cuando hacemos una entrevista por videollamada es «minimizar la pantalla en la que aparece la imagen del entrevistador y colocarla lo más cerca posible de la cámara del dispositivo, de esta manera será más fácil poder mirarle a los ojos cuando hablamos», precisa Gina Aran. Y mucho cuidado si ya tenemos creado un perfil de usuario en la aplicación con la que hacemos la entrevista. «Procuremos que la foto sea profesional, igual que el texto del estado».

El lugar elegido para hacer la entrevista tiene que ser lo más neutro posible y con una buena iluminación frontal. «Puede ser indirecta, pero que no se proyecte desde un lateral o desde abajo y mucho menos enfocar la cámara hacia una ventana porque entonces solo se vería nuestra silueta», explica la experta. Lo más práctico es usar una mesa y una silla para hacer la entrevista, «nada de sentarse en el sofá. «No hay que olvidar que estamos en una entrevista de trabajo, por lo que la estancia debe estar ordenada y sin ruido ambiental». Y muy importante, «arréglate de la misma manera que lo harías si fueses a la entrevista presencial. De los pies a la cabeza. Repito, de los pies a la cabeza. En primer lugar, por el respeto que la situación merece y segundo porque al arreglarnos nuestra actitud es otra», señala Aran. Eso sí, evita prendas con demasiados estampados, cuadritos o rayas porque hacen muaré (efecto óptico) en pantalla y resulta muy molesto para el entrevistador. «Si decidimos maquillarnos, tenemos que hacerlo uno o dos tonos por encima de lo habitual porque la cámara se come el color». Es importante hacer este tipo de pruebas antes de la entrevista.

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Es verdad que en las entrevistas de trabajo por videollamada muchas veces se pierde parte de la comunicación no verbal, tan importante a la hora de evaluar a un candidato. «No pasa nada porque gesticules, dibujes en el aire o enfatices con las manos. Ahora bien, no lo hagas delante de la cámara porque, además de ser molesto para el entrevistador, te tapas la cara», recuerda la profesora de la UOC. Aran también recomienda «darle un poco de color a nuestro tono» para evitar ser monótonos. «Las videollamadas cansan mucho, así que es importante ser pausados, vocalizar bien, pero no hablar demasiado lento para no dormir a tu interlocutor. Hay que prescindir de las muletillas porque la cámara las amplifica. Los candidatos dicen mucho eso de vale, vale y muy pocas veces dan las gracias. Acuérdate de esos detalles».

Y como recomendación final de la experta: «Escucha bien la pregunta, cuenta hasta dos y contesta. Es muy habitual que las videollamadas lleven cierto retraso, por lo que es buena idea hacer una pequeña pausa antes de contestar para no solaparte con tu entrevistador y asegurarte de que ha finalizado su intervención».

RECUERDA

Recoge y ordena

Asegúrate de que todo a tu alrededor está recogido y en orden. Que no aparezca ropa tirada por el suelo o comida encima de una mesa. Intenta, en la medida de lo posible, hacer la entrevista a solas. Sin personas pasando por detrás ni mascotas paseándose por el teclado.

El encuadre perfecto

Aléjate de la cámara unos 80 centímetros, la distancia suficiente como para que el encuadre alcance el tercer botón de la camisa, más o menos. Cuando gesticules con las manos no lo hagas delante de la cámara sino a la altura del pecho.

Vístete como si fuese presencial

«Si a una entrevista de trabajo no vas en chándal ni en pantalón de pijama, ¿por qué te vistes así para una videollamada? Imáginate que te tienes que levantar por cualquier circunstancia».

Prepara las respuestas

«Es habitual que en las entrevistas te digan eso de 'y ahora háblanos de tí' o incluso que te pregunten sobre cómo has llevado el confinamiento. Prepara las respuestas y si haces alguna pregunta, que sea profesional y no una trivialidad», alerta la experta.