Los nombres de los 15 restaurantes gallegos con Estrella Michelin se dieron a conocer el pasado martes, con la incorporación de Auga e Sal en Santiago de Compostela. Los reconocimientos a la cocina de Galicia, sin embargo, no cesan, y la guía ha hecho públicos los nombres de los 24 locales que han obtenido el galardón Bib Gourmand.

Guía Michelin España & Portugal 2022 cuenta con 284 establecimientos en esta lista tras la incorporación de 43 locales, tres de ellos en Galicia. Los restaurantes que ya pueden presumir de pasar a formar parte de la prestigiosa lista son el Ceibe, en Ourense, y A Viaxe y Anaco, ambos en Santiago de Compostela.

Pero, ¿cuál es la importancia de este reconocimiento? El Bib Gourmand identifica a los locales que ofrecen la mejor relación calidad-precio de la guía. Estos establecimientos «nunca defraudan» y ofrecen a los consumidores la posibilidad de disfrutar de una comida de calidad a precios «contenidos», según describe la propia guía. Quincemil ha reunido en esta lista los 24 restaurantes gallegos con el reconocimiento.

Terreo

Este establecimiento lleva más de tres años deleitando los paladares de sus clientes en el lugar que había ocupado el Árbore da Veira de Luis Veira. «Un local de línea moderna del que todo el mundo habla, pues en él intentan ofrecer una cocina elaborada aunque algo más informal, en base a platos ligeros pero… ¡tremendamente sabrosos!». Así describe la Guía Michelin al Terreo, un local de «cocina casual» situado en A Coruña que cuenta con el chef Quique Vázquez al frente de los fogones y con Ana Señarís como responsable de sala. El precio medio por persona es de entre 31 y 45 euros.

El de Alberto

Este negocio afronta una nueva etapa con un cambio de local a escasos metros de las playas del Orzán y Riazor. El propietario, Alberto Prieto, ofrece una cocina tradicional actualizada con platos cada vez más modernos de los que la Guía Michelin destaca sus «raciones generosas» elaborados con productos de calidad. El precio medio por comensal puede oscilar entre los 30 y los 50 euros.

Artabria

La Guía Michelin destaca de este restaurante la historia de su nombre, vinculado a una tribu de origen celta asentada en la zona, así como la decoración del comedor y el hecho de que la cocina sea parcialmente vista. «Pruebe las Cestillas crujientes de zamburiñas con crema de nécoras, los Rollitos de salmón ahumado con tártara de langostinos, su Arroz caldoso de carabineros… y, por supuesto, la Lamprea en temporada«, sugiere la publicación oficial, que cifra entre 34 y 45 euros por persona el gasto medio.

Mar de Esteiro

«Una de las mejores opciones para degustar pescados y mariscos de calidad». Así comienza la descripción que la Guía Michelin hace de este local situado a escasos kilómetros del centro de Santiago de Compostela. El edificio es una «imponente casona» rehabilitada y catalogada como Bien de Interés Cultural que cuenta con un bonito jardín, un bar privado y varios comedores.El Arroz con bogavante o el Guiso de rubio son dos de los platos recomendados a los comensales, que suelen gastar entre 33 y 55 euros por persona.

Anaco

Este local situado en la capital de Galicia tiene las paredes de piedra y está situado a escasos metros del Museo do Pobo Galego. «Encontrará una gastronomía actual y personal que convierte al producto gallego de temporada en el gran protagonista, con una pequeña carta que cambia periódicamente y sutiles guiños al continente asiático. Recomendamos reservar y pedir el menú (#amesaposta), pues concreta un buen recorrido por su cocina», recoge la Guía Michelin sobre este local del chef palentino Víctor Lobejón en el que los clientes suelen gastarse entre 25 y 40 euros.

Mamá Peixe

«Aquí la apuesta es clara: una carta reducida, de corte tradicional actualizado, que llama la atención por sus pescados. Sargos, san martiños, lubinas, cabrachos, rodaballos… el chef siempre hace alguno de estos pescados por piezas enteras, al horno y sobre patatas panaderas, aunque también destacan platos como el Arroz de bogavante o el Pulpo dorado a la mugardesa con alioli de naranja», describe la Guía Michelin sobre este sencillo local que obtuvo el año pasado el Bib Gourdmand. El precio medio oscila entre los 13 y los 45 euros.

A Viaxe

Estos son los 24 restaurantes gallegos reconocidos con el Bib Gourmand de la Guía Michelin

Este local situado en la capital gallega acaba de obtener el Bib Gourmand y es descrito por la Guía Michelin como un restaurante «curioso, tipo bistró». La propuesta del chef tiene alma peruana, su tierra natal, y está fusionada con influencias de otros países. A Viaxe permite a los clientes elaborar un menú degustación a medida según los platos de la carta y el tamaño que prefiera el comensal, lo que definirá el precio. Este, en todo caso, suele oscilar entre los 16 y los 35 euros y permite al cliente degustar platos procedentes de Perú, Colombia, Ecuador, Galicia y País Vasco, entre otros.

Pampín Bar

La Guía Michelin destaca de este establecimiento el ambiente tradicional de su interior, que contrasta con la moderna fachada. «El local, con originales sillones corridos en los laterales, una gran mesa central compartida y detalles estructurales en hormigón visto, apoya la idea de buscar la cocina casera de siempre, esa que ensalza los sabores de la infancia y que el chef denomina ‘de barrio‘. Ofrecen muchos platos para compartir, con un eje básico que gira en torno a los escabeches, los guisos y los pescados frescos del día», destaca la publicación, en la establece el precio medio entre los 20 y los 45 euros.

Café de Altamira

La relación calidad-precio de este restaurante es, según la Guía Michelin, «magnífica». El local, vinculado al hotel Pazo de Altamira pero con acceso y funcionamiento independientes, sorprende por su estética a medio camino entre lo rústico y lo vintage. La guía destaca que las mesas grandes están pensadas para compartir una cocina tradicional y actualizada, con personalidad, en la que se ensalzan los sabores gallegos. Situado junto al Mercado de Abastos, el precio medio oscila entre los 15 y los 40 euros.

Abastos 2.0 Mesas

Este local de cocina moderna con un precio por comensal que oscila entre los 30 y los 45 euros está, al igual que el Café de Altamira, junto al Mercado de Abastos de Santiago. La Guía Michelin lo recomienda a aquellas personas que quieran vivir una experiencia culinaria, ya que recrea un ambiente moderno, casual e informal. «Su oferta gira en torno a dos sugerentes menús que se complementan: uno corto con siete degustaciones y otro largo con tres platos más, todos fieles a una cocina moderna que bebe tanto de la tradición gallega como de los excelentes pescados y mariscos de la zona», indica la guía, que destaca la posibilidad de maridaje y recomienda reservar.

A Horta d’Obradoiro

«Maravillosamente singular, pues plantea una oferta gastronómica interesante y recupera para Santiago una porción de su dilatada historia», así describe la Guía Michelin este negocio que ocupa una casa de 1640 que siempre acogió a los músicos de la Catedral compostelana. La barra está hecha con vigas de bateas y el interior cuenta con muchos detalles que recuerdan las antiguas casetas de playa y una sala tipo invernadero, así como un huerto-jardín. Los comensales pueden disfrutar por entre 30 y 45 euros de cocina de mercado bien ejecutada y «presentada con gusto».

Asador Gonzaba

Un asador perfecto para degustar carnes de primera calidad. El local dispone de salones de ambiente clásico y privados y en él se sirven tres tipos de carne: ternera, vaca y buey gallego. «También tienen cordero de raza churra y pescados a la brasa según el mercado. La bodega, bastante completa, destaca por su selección de vinos gallegos», añade la Guía Michelin sobre este local en el que se puede comer carnes a la parrilla por entre 35 y 50 euros.

Casa Barqueiro

«Una casa de gestión familiar llevada con la dosis perfecta de talento, simpatía y profesionalidad. El negocio presenta un concurrido bar-vinoteca, con algunas mesas para tapear, así como un cuidado comedor interior dotado con un bello mural del bucólico Ponte Maceira y una vistosa bodega acristalada que asume casi todo el protagonismo», describe la Guía Michelin sobre este establecimiento de cocina tradicional gallega y honesta que destaca por la calidad de sus carnes y por los precios ajustados, a entre 33 y 45 euros por comensal.

O Balado

La gastronomía de kilómetro 0 tiene en este local uno de sus máximos exponentes. «Vivimos en pleno entorno rural, así que promovemos la economía local comprando a los productores cercanos. Por otra parte, usamos las sobras orgánicas para alimentar a nuestros animales (ovejas, burro, gallinas, perros…) y recurrimos al agua ‘Km 0’ para el servicio», destaca el chef, Roberto Filgueira Alonso. Este restaurante con precios medios de entre 30 y 45 euros ofrece calidad en sus platos tradicionales, como el Jurel ahumado o el Rabo de vaca de Bandeira estofado.

Villa Verde

Situado en una comarca famosa por sus viñedos y pazos, Villa Verde está instalado en una casa de campo de piedra del siglo XVIII reconvertida en una bodega-lagar, un comedor rústico en el que no falta la lareira y una sala con montaje clásico. «Su cocina tradicional y de corte casero se ve enriquecida con productos de temporada, trabajando bastante las setas, el rape, las carnes de ternera… ¡No se pierda la Merluza guisada al horno con erizo de mar!», propone la Guía Michelin sobre este local en el que cada persona suele gastarse entre 33 y 90 euros.

Muiño

Este restaurante suele llenarse con los clientes habituales de la zona y dispone de un sencillo comedor en el que se sirve el menú del día, así como dos salas a la carta en el piso superior. La cocina de Muiño es tradicional gallega, con productos de «indudable calidad» entre los que destacan los buenos mariscos y las sabrosas carnes a la parrilla, aunque la especialidad del local es el Bogavante con arroz. El precio medio, según indica la Guía Michelin, oscila entre los 12 y los 50 euros.

O Fragón

Emplazado en un lugar idílico en la ladera de un monte con vistas al puerto de Fisterra y a la ría, los responsables de este local se describen como hijos de marineros y campesinos que buscan cuidar al máximo el producto y que trabajan desde el respeto por el entorno. La carta no es muy amplia pero contiene platos de cocina tradicional gallega actualizada, y también puede elegirse entre dos menús degustación. El local, con un precio por persona de entre 39 y 55 euros, tiene maridajes con vinos gallegos de pequeños productores de la zona.

A Taberna do Trasno

A Taberna do Trasno «devolvió la vida» a una casa de piedra que ahora tiene un interior moderno. Los platos tradicionales y los modernos conviven en una carta en la que no faltan los mariscos, los productos a la brasa o un apartado de cocina de fusión llamada «Un paseo por el mundo». El precio por persona es de entre 30 y 45 euros y la Guía Michelin recomienda probar el Pulpo a la brasa sobre crema de cachelos o la Merluza de Burela a la brasa con almejas y reducción de albariño.

Ceibe

Ceibe se une este año a los restaurantes gallegos con Bib Gourmand de la mano de los cocineros Lydia del Olmo y Xosé Magalhaes. La pareja dirige un local con paredes de piedra y estética minimalista que sorprende por tener la cocina totalmente abierta a la sala. «Platos de raíces gallegas presentados de manera actual y con guiños asiáticos, todos ellos sujetos a tres menús degustación sorpresa que varían en función del número de pases que ofrecen (Xeito, Enxebre y Esmorga)», indica la Guía Michelin sobre este establecimiento en el que se puede comer por entre 34 y 69 euros.

Pacífico

Los abuelos de Francisco Domínguez montaron este negocio familiar en 1975 y el ahora propietario lo ha amoldado a los nuevos tiempos. El local tiene un bar-cafetería en la entrada y un restaurante tipo bistró con la cocina vista al fondo. «¿Su propuesta? Un único menú degustación de tinte actual de lunes a viernes, basado en productos de proximidad y temporada, así como un completo brunch los fines de semana«, indica la Guía Michelin. Los precios de esta moderna propuesta varían entre los 32 y los 35 euros.

Casa Marco

La cocina tradicional de este local permite a los comensales disfrutar de una comida por entre 35 y 45 euros. «En conjunto presenta un montaje de elegante línea clásica-actual, destacando la sala del fondo por tener un ventanal que permite ver las evoluciones del chef. La carta, que presenta un buen apartado de carnes, se enriquece con algunos arroces, pescados de mercado y apetecibles especialidades, como el Lomo de bacalao al horno encebollado con patatas panadera o la riquísima Sopa de chocolate blanco con helado de cítricos«, recomienda la Guía Michelin.

Morrofino

Este restaurante-taberna gana cada vez más adeptos entre los foodies con su sencilla estética urbana y la cocina abierta de la barra para que los fogones sean los protagonistas. Morrofino propone elaboraciones actuales, técnicas y divertidas con tintes creativos y detalles de la comida a pie de calle que respetan los sabores tradicionales. «En la carta, bien apoyada por un menú degustación, encontrará platos para compartir y unas atractivas elaboraciones que, en algunos casos, miran hacia otros países a través de interesantes fusiones«, explica la Guía Michelin. El precio varía entre los 35 y los 42 euros por persona.

Abisal

Este local elegante y contemporáneo hace una propuesta fresca, técnica y sorprendente. «Aquí apuestan claramente por una cocina de mercado de tintes actuales, bien presentada y abierta en exclusiva a los productos con la mejor relación calidad/precio encontrados cada día, lo que obliga según las propias palabras del joven chef, Adrián Fuentes, a un constante ejercicio de inspiración e improvisación», indica la Guía Michelin. La oferta gastronómica se limita a unos menús degustación que varían constantemente, siempre divertidos y llenos de sabor y que oscilan entre los 29 y39 euros.

Trasmallo

  • Este restaurante familiar en el que el comensal puede gastar entre 15 y 50 euros de media, hace una propuesta gastronómica muy vinculada al mar: su nombre, de hecho, hace referencia al arte de pesca artesanal más común entre los marineros de la zona. La Guía Michelin destaca una carta con arroces y carnes y protagonizada por los pescados y mariscos comprados a diario en la lonja situada a escasos metros e indica, además, que el local dispone de su propio vivero.

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